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¿Por dónde empezar?

Por lo tanto, adelantamos que el primer paso para nuestra evolución-recuperación de nuestro ser, consiste en ACEPTAR, desde un principio al menos, un pequeño cambio, un mínimo cambio en nuestras vidas. Digo mínimo, porque aunque parezca exagerado, lo más difícil es este paso.

Conseguido este paso de manera auténtica y profunda, puede que los demás pasos ya ni hicieran falta y empezaría a notar resultados desde ese instante.

Pero tiene que verse claro. Tampoco pasa nada si no se consigue a la primera. De hecho no es fácil que esto pase. La cosa requiere su tiempo, porque en la mayoría de las situaciones actuamos por una inercia de años, con unos aprendizajes mínimos que se han instalado para autoengañarnos. Más adelante, trataremos de estos engaños del ego.

       El caso es que vayamos aceptando que el cambio es posible y nuestra tranquilidad también. Miles de personas lo consiguen cada día.

   Como primer ejercicio general, proponemos que, usando el método que mejor queramos (meditación, relajación, respiración, ejercicio físico, musicoterapia, algo al alcance de cualquiera y para lo que no necesitamos asesor), consigamos, y, permítanme la expresión, que sólo por un instante: TODO NOS IMPORTE UN BLEDO.

    En algún momento, todos hemos sentido esta sensación, por desgracia, más cerca de la infancia y la adolescencia, que de la “madurez”, pero sabemos de qué se trata.

    Cuando consigamos mínimamente ese grado de “desconexión”, estamos más cerca de conectar con nuestro auténtico YO. Esa fuente de felicidad y armonía que habita en nosotros. 

     Puedo asegurarles que una vez que se consiga esto (eso sí sin desesperarse, irá saliendo, sin forzar, para el viaje interior no valen los métodos de la vida diaria, se sabe cuando se consigue) podremos volver a realizarlo cuantas veces queramos.

      Los resultados de este ejercicio son múltiples. Destaco dos:

      a) el, ya mencionado, de acercarnos a ese ámbito de equilibrio,

   y b) una impresionante capacidad de “descansar” de las rutinas que nos envenenan día a día.

      Más adelante hablaremos de las otras saludables consecuencias.

    Pruébenlo, y coméntenme sus resultados.

Gracias.